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6 de octubre de 2013

EL MISMÍS, DIMINUTO ÁCARO CON INCLINACIONES IMPÚDICAS O LASCIVAS

Este vergajito animal es como se dijo, un diminuto ácaro que habita en la vegetación baja, como los matorrales y pastizales. Suele sentirse mayormente su presencia, cuando quiera que en dichos lugares paste o permanezca el ganado.

Es un bicho de tierra templada y caliente, pariente cercano de las garrapatas, llamado o distinguido también como coloradilla, coquita, piojito de cigarra y otras denominaciones. En Santander y creo que en Colombia toda, se le conoce genéricamente como “mismís”.

Suele adherirse a los seres humanos y animales que circulen por su hábitat, para alimentarse de su sangre; provocando adicionalmente por obra de sus mordeduras y secreciones, un intenso escozor o rasquiña que puede prolongarse por varios días.

La literatura disponible sobre el particular advierte que algunas especies pueden llegar a ser transmisoras de enfermedades como el tifus.

Las larvas son normalmente de color naranja o rojo, con solo seis patas; pero desarrollan ocho en su fase de ninfa. Las larvas pueden medir 0,2 milímetros. Los ácaros adultos están sobre 1mm de longitud.

Centrándonos en las molestias que estos animalitos causan en los seres humanos, alguien recientemente me refirió una teoría que habrá de ser profundizada; según la cual los ácaros y todo tipo de insectos “chupasangre” como zancudos y tábanos , solo tienen en el inventario de sus víctimas a aquellos cuyo tipo de sangre es O+.

Teoría no descabellada que fácilmente puede ser real, apuntalando o reivindicando a todos quienes han pronunciado la vieja frase: “Es que yo soy dulce para esos bichos”. Si, porque hay algunos (Quizá con otro tipo de sangre) a quienes estos animalejos nunca molestan.

Bueno, pero para hacer referencia al rótulo, la gran conclusión o una de las principales características del ácaro es que luego de adherirse al humano en los tobillos, emprende la travesía hasta llegar a su destino, a su playa, a su restaurante, a su resort; que no es otro que los genitales.

Y a rascarse allí se dijo, por tres días o más,  por cuenta del diminuto huésped. Por cuenta del gran mismís.


Usted es O+??; a usted le han picado las “guandumbias”??