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27 de agosto de 2011

LA RUTA DE LA TRANSVERSAL DEL CARARE


Surge en Barbosa, desde donde se desprende de la troncal que comunica a Bogotá con Bucaramanga y recorre la geografía del sur de Santander. Serpentea la cordillera pasando por Vélez, circundando a su paso importantes y hermosas localidades como Guavatá, Bolívar y El Peñón, para descender a Landázuri y Cimitarra y empalmar finalmente con la hoy llamada Ruta del Sol, a la altura de Puerto Araújo.

Su recorrido goza de agradables climas, que van desde el templado de Barbosa, el frio de Vélez y el más frio aún en el alto de “Palo Blanco”, empezando allí a ganar calor en la medida que se avanza, alcanzando una temperatura templado cálida a la altura de Landázuri, para luego encontrar el pleno calor del trópico en Cimitarra y todo el valle del Río Carare.

Son significativas las reservas de fauna y flora que afortunadamente aún perduran en la zona y hay lugares prácticamente vírgenes y arcanos como el muy mentado “Cerro de Armas”, que a lo lejos se aprecia en el viaje.









La ruta de la transversal del Carare, es la ruta de la cultura y el folclor. Nadie en el país desconoce la importancia del desfile de las flores y el festival nacional de la guabina y el tiple, que anualmente se desarrolla en Vélez, con la participación de los municipios de la provincia. Desde temprana edad se estila usar y honrar los trajes típicos regionales y por supuesto también a interpretar los aires propios como la guabina y el torbellino. Se avanza en otros campos como el teatro y empiezan a surgir festivales de otros géneros musicales.





Manifestaciones culturales variadas afloran con ocasión de las ferias y fiestas de cada localidad, alcanzando dichas muestras renombre y alcance nacional, por lo que el flujo de turistas es de veras creciente y se cree que seguirá tal tendencia.







Esta es también la ruta de los mundial mente famosos bocadillos Veleños, de los quesos de hoja, de las almojábanas, de las arepas de seco, de los amasijos y de la más variada y exquisita gastronomía.






Es la ruta de las frutas propias de cada clima y de una muy amplia gama de hortalizas y verduras.











Es la ruta del Cacao, siendo Landázuri y Cimitarra juntos, una de las zonas con mayor producción nacional. Es también con un futuro promisorio a la vista, la ruta del caucho.






Importantes ganaderías de carne y leche, se aprecian a su paso, generando comercialización, procesamiento y ocupación laboral muy significativa.








Es la ruta que acorta la distancia entre la capital de la República y la Costa Caribe en una apreciable cantidad de tiempo, a lo que debe sumarse el buen clima de su transcurrir, como antes se dijo.

Es una ruta que cuenta con una apreciable estructura comercial, dentro de ella la de bonitos y equipados centros recreacionales, inmejorables piqueteaderos  y restaurantes y una creciente oferta hotelera.

El turismo es sin duda uno de los renglones que mas alimenta nuestras expectativas. Aparte de lo ya expuesto es preciso anotar que hay opciones agro y eco turísticas a disposición y una gran idea por madurar, que sería la realización del festival náutico del río Carare, patrocinado por empresas de nivel nacional, que iría desde el Municipio de Puerto Parra, pasando por Puerto Araújo y Santa Rosa en Cimitarra, para terminar en el Corregimiento de la India en Landázuri; evento que nos permitiría como valor agregado el estar vigilantes de la tala indiscriminada de sus riberas y la conservación de sus especies.

Pero quizá la razón más importante para invitar a Colombia entera a transitar por la ruta de la Transversal del Carare, es que a lo largo y ancho de la misma habitan gentes amables y buenas, que estarán prestas a dar todo de sí para recibir y atender a visitantes y transeúntes.

Desde luego que todos los buenos propósitos e ideas consignadas, deberán ser apoyadas con ahínco por nuestro gobierno nacional, pues la vía presenta notable deterioro en los tramos de antes asfaltados; hay actualmente sectores en construcción y otros destapados sin obra alguna, amén de la carencia de señalización en un alto porcentaje de su extensión.






Demandamos de nuestros políticos, gobernantes y dirigentes, se sirvan apersonarse de este empeño, en el que los habitantes y residentes de la zona de influencia del carreteable, también comprometeremos nuestros esfuerzos.

LUIS DANILO GRANDAS GÜIZA
Cimitarra - Santander, agosto 27 de 2011

23 de enero de 2011

REFLEXIONES SOBRE POLITICA COMARCANA

Dicho de modo sencillo, esto es, sin entrar en mayores honduras o profundidades, la política es la actividad ejercida por aquellos que rigen o quieren regir o manejar los asuntos públicos de un ámbito geográfico determinado; como también lo es la acción de todo ciudadano cuando interviene en los mismos asuntos con su voto, su aporte a nivel de programas o proyectos o con su simple opinión.

Entonces, el manejo de los asuntos públicos, impone la obligación de atender los anhelos, aspiraciones, requerimientos, necesidades y urgencias de todo un conglomerado, sin excepciones; a diferencia de la actividad privada donde todo se orienta a la satisfacción de intereses ídem.

Conforme a lo anterior, quien haya incursionado en política o quiera hacerlo, ha de saber que su compromiso y su misión deben irremediablemente estar ligados a los intereses de la comunidad o colectivo que representan o quieren representar.

De no ser así, su entrada o permanencia al frente de estos asuntos, no cumple en modo alguno con el deber ser, como tampoco guarda fidelidad al encargo o mandato confiado por cientos o miles de ciudadanos, añadiéndoles nuevos elementos de frustración y postergándoles injustamente sus anhelos.

Por ello, si Usted no se enmarca dentro de las prescripciones de una bien entendida política, no irrumpa en esas lides, o si ya lo ha hecho sin los resultados que las gentes esperan, encáucese hacia otras vocaciones que puedan resultarle provechosas.

He hecho estos iniciales comentarios, atendiendo a que nos encontramos ad portas de un nuevo proceso político electoral regional, donde es necesario actuar con la infaltable seriedad que el asunto demanda.

Recapitulando tenemos que el dirigente o aspirante político, debe tener y asumir un grande e importante compromiso colectivo. Aunado a ello, debe contar con ideas, planes y proyectos concretos, a cuya efectiva materialización ha de dedicarse por completo y sin desmayo.

Está claro que no queremos políticos que nos traigan en inaceptable reiteración el estribillo, el disco rayado o discurso genérico, que se van a dedicar a trabajar por “la educación, la salud, las vías o las madres cabeza de hogar, etc”, como inveteradamente se ha hecho; porque ahora nuestro apoyo electoral se orientará a favor de quienes manejen ideas concretas, pero por sobre todo se encaminará a favorecer a aquellos que tengan un claro y buen sentido de región.

No se dude que los esfuerzos colectivos o plurales a nivel de dirigencia, rinden mayores y mejores resultados que aquellos adelantados de modo individual o personal.

Que falta ha hecho en el sur de Santander, específicamente en la Provincia de Vélez y en la Región del Carare Opón, la comunión de nuestros dirigentes en torno a objetivos regionales de sumo interés.

Cuantas oportunidades se han desperdiciado o se han dejado ir para otras regiones o departamentos, por ausencia de la mentada comunión o unidad.


Cuantos recursos se han dejado de traer, cuanta presencia estatal se ha negado a los nuestros por la inexistencia de una fuerza regional que reclame lo que corresponde.

Esa desafortunada tendencia ha de formar parte del pasado y nuestros futuros dirigentes y gobernantes deben apersonarse en buena forma del asunto.

Claro que esfuerzos en tal sentido han empezado a florecer, por lo que es propio destacar lo hecho por algunos, relievando en especial el sentido de lo colectivo y regional que asiste al Señor Alcalde Municipal de Bolívar, a quien no tengo el honor o privilegio de conocer, pero de quien sé y he oído de su permanente tarea enfocada al remedio y satisfacción de las necesidades de la comarca entera.

Otros por el contrario, cada vez que se convocan foros o reuniones para tratar asuntos que nos afectan o interesan a todos quienes en esta región nacimos o habitamos, ni siquiera se toman la molestia de enviar una representación, mucho menos la de asistir y otros no atinan a decir absolutamente nada.

Señores, hay mucho por hacer y debe hacerse ya con fuerza y unidad.

La transversal del Carare es un elemento que debe convocarnos a todos, para demandar su efectiva construcción y reparación, pues todo el sur de Santander tiene que ver de uno u otro modo con ella; hay que ocuparse de temas como la dotación y buen servicio de nuestra red hospitalaria; la región demanda desde hace tiempo el establecimiento o presencia plena y real de centros de educación superior; es imperativo trabajar en la promoción de la región conformando circuitos o paquetes turísticos; nuestros colegios no dan abasto a la creciente población estudiantil por lo que es necesario echar mano a ideas que se traduzcan en realizaciones; debe abogarse por la mejora y servicio de la administración de justicia; hay un buen número de agencias estatales en varios campos de las cuales carecemos; deben adelantarse políticas que favorezcan la inversión; ya debe pensarse en la construcción de acueductos regionales; en fin, son muchos y muy puntuales los temas que se pueden abordar, en los que podemos ayudarnos mutuamente y sobre los cuales es necesario actuar sin demora.

Pero con mención especial debe consignarse, que si existe unidad regional, temas espinosos y difíciles como la paz, la convivencia y la seguridad, pueden tener un mejor manejo que ha de traducirse sin duda en bienestar y tranquilidad colectiva.

Entonces, como se dijo, no serán de recibo los políticos que nos “enreden” con el consuetudinario argumento, que trabajarán sin concreción alguna, por …….“la salud, la educación y las madres cabeza de hogar”……

LUIS DANILO GRANDAS GÜIZA